Ahora toca una
zona de bajada rápida hasta la Cañada de Talavera que reconoceremos rápidamente
al ver las dos lagunas cercanas. Desde aquí nos espera una larga subida de unos 4 kilómetros
que trascurre por la cañada, el camino de Valdenoches que cogimos a la
derecha, y que culmina con la subida al repetidor por un pedregal que nos deja sin aliento. Tras
reagruparnos continuamos la marcha con una bajada rapidísima en la que Jose “el
niño” disfrutó haciendo cruzadas y saltos, qué crack! Pero lo bueno se acaba
rápido y la bajada nos dejo a los pies de un cortafuego con un 20% que nos calentó las piernas para poder llegar
arriba…y ya sí, por fín, estar en lo alto del Cerro de las Mucas y delante de la senda
de las Zetas!
Encaramos ansiosos la bajada que nos hará descender 200
metros de altitud por el sendero conocido como las “Zetas de Pelayos”. Sendero
técnico, rápido y que nos hacer bajar en tensión, pero que al final nos hace
gritar un yeahhhh!! de satisfacción ;)
Ya centrándonos…cogimos el camino de Valdeyernos para llegar
de nuevo a la Cañada de Talavera, que en esta parte, de subida, se encuentra
asfaltada y que abandonamos para coger un camino a la izquierda que nos llevará
a una zona poco transitada, con mucha maleza y que termina en unas bajadas con
algún punto al 30%, muy sueltas, y que
hacemos derrapando, dejándonos caer casi continuamente. Zona de culo atrás, a
tope!. Tras pasar a pie un árbol caído, por fin llegamos a la cola del embalse
de Picadas, donde empieza la segunda parte de la ruta…
Segunda parte más rodadora que nos llevará de vuelta al
punto de partida. Recorremos todo el embalse de Picadas hablando de los
siguientes cursos a impartir: “lo que es subir y lo que es bajar” por Juan
Carlos, jaja. Foto de rigor en la presa y echando leches que Jose Cociarte
tiene prisa (y su mujer también).
Tras coger unos kilómetros de la
carretera nos desviamos a la derecha para bordear el Safari Park, donde pudimos
ver avestruces, bisontes, llamas, cebras, leones…por un camino entretenido hasta llegar a la carretera M-507 a la altura de
"El Rececho", donde cruzamos la misma para enlazar con el antiguo
trazado del ferrocarril Madrid-Almorox y ya encarar los últimos kilómetros del
día.
Día de verano con mucho calor, Jose Cociarte no dijo su
famoso “me aburrooo”, las Zetas espectaculares y ruta con un poco de todo que
completaremos en otra ocasión haciendo un bucle por San Martín de Valdeiglesias
añadiendo mas senderos.Lo mejor, la compañía y lo bien que nos lo pasamos a los largo de toda la ruta, incluido las cervecitas y el aperitivo en casa de Raúl Cubas, ñam, ñam!! Habrá que repetirlo!!
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